Back to Top

Transmisión anómala

Transmisión anómala Transmisión anómala

Transmisión anómala

Transmisión anómala es un trabajo basado en estudios recientes[1] sobre las transmisiones presísmicas en la banda VHF —señal de radio— que provienen de la incidencia de los terremotos en el espectro electromagnético, concretamente en las frecuencias muy altas donde se sitúan la mayoría de nuestras transmisiones audiovisuales. El interés de este tema radica en evidenciar la relación e interacciones no aparentes entre los estratos —geología— y nuestras tecnologías de la comunicación, así como referirse a ondas no perceptibles para nuestros sistemas sensoriales —ondas electromagnéticas— y otras que, a pesar de su perceptibilidad, son incomprendidas por su escala temporal —movimientos sísmicos—.

La instalación representa la incidencia de los movimientos geológicos en el espectro electromagnético mediante el roce de dos rocas que interfieren en una transmisión VHF. Mediante el uso de micrófonos de contacto en el interior de las rocas, las ondas sonoras del contacto entre ellas se transducen, amplían y emiten mediante un transmisor de radio. Un receptor de radio utiliza la señal de audio transmitida desde las rocas para interferir en la proyección de un canal de televisión muerto.


[1] En las últimas décadas, se han registrado precursores electromagnéticos de eventos sísmicos en amplios rangos de frecuencia en todo el mundo. Existen dos tipos de fenómenos anómalos: la emisión anómala y la propagación anómala de señales electromagnéticas. Estos fenómenos abarcan una amplia gama de frecuencias, desde las bandas de corriente continua hasta las de alta frecuencia. Kushida y Kushida (1998, 2002) introdujeron un método empírico de predicción de terremotos basado en el seguimiento de las ondas de radio anómalas en la banda VHF transmitidas desde una estación de radio FM más allá de la línea de visión. Sakai et al. (2001) demostraron que la propagación anómala de las ondas de radio en la banda VHF emitidas desde una estación de radiodifusión de la ciudad de Sendai estaba relacionada con los terremotos de magnitud superior a 5 que se produjeron en la zona situada entre Sendai y el observatorio de Tateyama, en la prefectura de Chiba. Fukumoto et al. (2002) confirmaron que los eventos de propagación anómalos eran el resultado de la dispersión de las ondas de radio en la banda VHF inmediatamente antes de los terremotos, documentando la recepción en un observatorio que estaba más allá de la línea de visión del lugar de transmisión. Las intensidades recibidas de las ondas dispersas eran más fuertes cuando la antena estaba en un ángulo menor, lo que implicaba que el cuerpo disperso estaba en la atmósfera media y no en la ionosfera (Pilipenko et al. 2001). Fujiwara et al.(2004) también llegaron a la misma conclusión utilizando un método más riguroso, y no registraron ondas dispersas cuando las antenas estaban orientadas verticalmente. Hayakawa et al.(2007) describieron un mecanismo de generación de perturbaciones atmosféricas resultante de los cambios en las cantidades geoquímicas asociadas a los terremotos, y Yonaiguchi et al. (2007) discutieron que el efecto de la propagación de las ondas VHF de largo alcance suele deberse a los conductos de radio meteorológicos.

Performance lanzamiento

Send this to a friend